Con tantas cosas que suceden en el mundo, el yoga puede ser una gran manera para armonizar el cuerpo y la mente. También puede ayudar a los niños a ser más flexibles y a concentrarse mejor. Tus pequeños pueden practicarlo por su cuenta, cada que lo deseen.

Todo lo que necesitás para esta actividad es:
- Ropa cómoda
- Una alfombra
Estas son las instrucciones para leerle a los niños...

Paso 1: Empezá con respiraciones profundas para relajar el cuerpo y mente. Respirá hacia dentro y hacia afuera lentamente, a través de la nariz. Para la posición del árbol, parate derecha y levantá lentamente la pierna izquierda, colocando el pie izquierdo contra la rodilla derecha. Levantá ambos brazos y juntá las manos encima de la cabeza. Aguantá tres respiraciones y posteriormente, bajá lentamente brazos y piernas. Repetí en cada lado.

Paso 2: Para lograr la posición de cobra en el tapete, recostate boca abajo con las manos aplanadas, debajo de los hombros. Extendé los brazos y lentamente levanta la cabeza y el pecho, curveando tu espalda. Respirá lenta y profundamente, inhalando y exhalando, a través de la nariz. Regresá delicadamente a la posición inicial, y repetí.

Paso 3: Para la posición de “el gato”, arrodillate en la alfombrita con las manos planas debajo de los hombros, de espalda al piso. Posteriormente, curveá de forma lenta la columna vertebral hacia arriba, dejando caer la cabeza. Respirá y después regresá la columna a una posición nivelada.

Paso 4: Terminá con la posición de “el niño”. Arrodillate y sentate en tus talones, mientras bajas la cabeza y el cuerpo a la alfombrita con los brazos extendidos al frente. En este punto, relajate para hacer varias respiraciones.